¿Dónde está Toledo?

Una vez que he subido a la web hasta el capítulo 21 de "Esperando a mi Daddy", cuando Jessica va en camino de encontrarse con su anhelado y a la vez desconocido Daddy, es el momento de hacerse esta pregunta.

¿DÓNDE ESTÁ TOLEDO? ¿CÓMO ES ESA CIUDAD? ¿CUAN LEJOS O CERCA ESTÁ?

Para alguien que como yo vive aquí, la respuesta es fácil sencilla, no hay más que asomarse por la ventana para ver la calle, el tráfico, a la gente pasar y darse cuenta que se está en una ciudad, que para conocerla no hay más que poner un pie en la calle y recorrerla. Dependerá del barrio en que se viva que se perciban unas sensaciones u otras porque cada cual tiene sus particularidades y evidencia el desarrollo historico e industrial de la ciudad, desde su parte más antigua, con restos de la epoca romana, cuando la ciudad tenía todo su esplendor hasta la actualidad que de algún modo evidencia que se ha perdido esa relevancia histórica y se ha convertido en un lugar que no ha perdido del todo su lugar en el mundo.

Sin embargo, las motivaciones que tiene Jessica con respecto a esta ciudad no son tan objetivas, ella se mueve impulsada por el deseo de descubrir su pasado, que alguien le descubra la veracidad de sus orígenes, de ahí que a lo largo de todo el desarrollo de la novela, de estos capítulo, su concepto e idea de la ciudad se ha visto condicionado e influenciado por su propia imaginación. La imagen que ha tenido de la ciudad ha sido un claro reflejo de sus propios sentimientos, más que de un estudio pormenorizado, ni tan siquiera superficial, porque para ella no tiene demasiado sentido el hecho de mostrar interes por algo que tal vez no signifique nada. Ha preferido siempre fijar su atención e interés en algo tangible.

Entonces ¿Dónde está la ciudad de Toledo? ¿Cómo se llega hasta allí desde Medford? ¿Y desde su fantasía a la realidad? ¿Con qué se encontrará cuando descubra la verdad, cuando por fin ponga un pie en Toledo?

Desde que se empezó a imaginar la ciudad su fantasía le llevó a crear una especia de utopía, donde los lugares más emblemáticos del mundo tenían su copia o referente en Toledo. Todo lo que a ella le gusta o llama la atención ha de estar en Toledo. En cierto modo, con un poco más de criterio y objetividad, incluso se llega a plantear sobre la coherencia de esas suposiciones sin fundamento, dado que si su lugar de ensueño no es tan maravilloso, tal vez su anhelado Daddy tampoco lo sea. De hecho, ya tiene alguna constancia de que éste tampoco es alguien tan maravilloso como ella esperaba, es alguien que no le resolverá sus problemas económicos, pero ello la da más sentido a su esperanza de que lo que reciba de él sea cariño, que éste no creo que le mueve el interés.

¿Y la ciudad de Toledo tiene: playa, aeropuerto internacional, una replica de la Ciudad del Vaticano, del edificio del Pentágono, la Casa Blanca, etc.? ¿Tiene grandes avenidas? ¿Acaso hará que Jessica se sienta frustrada porque no es que vaya a descubrir que el poco o mucho esfuerzo que ha tenido por imaginársela al final ha sido una pérdida de tiempo? ¿Es una ciudad tan utópica?

Lo único que tiene claro y seguro es que la ciudad debe tener alguna relevancia importante, dado que en su libro de Spanish I, cuando cursaba 9 Grade en el Medford High, curso 1995-96, había un apartado dedicado a la ciudad. Se trataba de Toledo, no de Vigo, donde su amiga Yuly pasa los veranos, ni de Madrid que es la capital del país, tampoco de Barcelona ni de Sevilla que fueron dos ciudades destacadas en 1992. Además, ella mantiene la creencia de que en junio de 1995, ese lugar al que Ana le llevo era Toledo, pero es un dato que aún nadie le ha confirmado.

Como se dice en un pasaje de la novela, después de haber visto la película de "Los piratas del Caribe", se llega a insinuar, con cierto grado de humor, que tan solo aquellos que han estado en Toledo saben el camino para llegar. De seguro Jessica sabe que han estado la madre de Yuly y Ana, pero ella emprende el viaje sola, sin saber muy bien con qué se encontrará ni lo que le espera cuando llegue